lunes, 30 de mayo de 2011
Pánico Extra: Perdí mi juventud en Curauma.
domingo, 15 de mayo de 2011
Pánico: Fuera de tiempo
Tomo el celular que suena rompiendo la oscuridad de mi pieza. Odio cuando me llaman en medio de la noche, porque después no puedo seguir durmiendo, me tiembla el cuerpo y no logro tranquilizarme, pienso que todo puede pasar.
Veo el número, me cuesta darme cuenta que no es un mal sueño, pero el aparato vibra, y mi brazo se adormece sosteniéndolo, estoy tenso, es como si me llamara el diablo para comunicarme espléndidamente que está al otro lado de mi puerta con una caja de cigarros y unas películas de cine rumano sin subtítulos
Cierro los ojos, parece que me estoy durmiendo, claro, siento esa pesadez placentera y ese cosquilleo en los ojos vuelve para hacerme sentir feliz. Suena nuevamente el celular, vibra como el diablo, miro el visor, al carajo.
-¿Qué mierda quieres?- respondo.
-¿dormías?...
-Obvio, supongo que tu no.
-Pensaba en ti, ¿vendrás a santiago algún día?.
-No.
-Tus dibujos siguen en mi techo.
-Y los tuyos en mi corazón.
-tienes mi disco de Pulp.
- Ya no, han sido tiempos difíciles., lo vendí.
- Pues supongo que estamos a mano.
-No Soledad, no lo estamos, te pusiste un anillo y le diste fechas a tu vida, ¿no lo recuerdas?.
- Si lo recuerdo, no pasó hace tan poco. ¿Dónde estás viviendo?
-En el basurero donde me dejaste.
-¿Sientes que el mundo te debe algo?-se escucha que sollozos al otro lado.
-Pues claro…un recibo, o una multa por lo menos.
-¿Cortarás?
-Si, ya estoy tranquilo, o sea, no entiendo tu llamada.
-Es duro que seas así conmigo.
-Anillo, vestido, plata, al carajo.
Corto el celular y lo lanzo al final de la pieza, me cubro con las mantas, y comienzo a darle un sentido a mi día que empezará en tres horas más. Adiós Soledad.